sábado, 17 de abril de 2010

DESPEDIDA



DESPEDIDA

Ahora que duermes en mí y en mí despiertas

atiende a la bondad y dime, gentil entre gentiles,

¿Cuándo llegaras a la cita? Es todavía temprano

y las promesas son dátiles llevados por las

frías corrientes del día hacia la noche.

Hace frío ahora que duermes ligeramente e

imperceptiblemente abandonas la errancia,

temprano entre sauces junto a un verano invicto

y cruel en su hermosura, mientras arden las

noches y los cuerpos colmados estallan de locuras.

Curioso es ya no estar sabiéndote y aún beber

contigo, ahora que duermes el sueño de los nombres,

más vivo que yo, tú escriba. Sonámbulos estábamos.

Tú en la muerte y yo en la vida.

Y el violento clima abandonado a la melancolía de la pesada tierra

deja su luz de primavera indómita velar en mí.

Aquí estaré para acunar tu nombre

vertido ya en mi hiel. En mí reposa.


MORIR EN LA MUERTE


Toma mi nombre de muerto, el lugar de mi ausencia y hazme

presente vivo entre los muertos, muerto entre vivos. Por el nombre

entra la muerte al mundo, viene el hombre a nacerse

y decirse palabra por el nombre

se toma posesión de las horas, los dolores y el aire

En tu nombre, muerte, hazme

eco entre sombras, dame en tu

lengua el rostro y hazme

nacer en ti.
Oscar Portela
Melan